domingo, 20 de enero de 2013

Breve resumen de la crisis


Comenzamos en el año 2001. Es en este año cuando ocurre la explosión de la burbuja de Internet, debido a que se había hinchado el mercado de Internet. Ocurre con las grandes empresas de Internet, que todas van a cotizar en bolsa. Ocurrió, por ejemplo, con Terra, un portal, que sale a bolsa. Empieza a subir el precio de la acción rápidamente. Siguen comprando, y sigue subiendo, hasta que se cae porque esta iba hinchado…Esto ocurre, en mi opinión, por que la gente cada vez se apunta a más  a la cultura del pelotazo (conseguir mucho dinero muy rápido y en muy poco tiempo), para forrarse. Pero llega un momento en el que si algo sube mucho y muy rápido, acaba cayendo. Esto suele ocurrir en economía.

Más tarde, en el año 2002, la reserva federal de Estados Unidos baja el precio del dinero del 6,5% al 1%. Esto sucede en un espacio de tiempo muy corto (2 años). Con “el precio del dinero” me refiero al precio de pedir prestado el dinero. Lo que ocurre entonces, es que al bajar los intereses de los préstamos, la gente se animó a pedir préstamos. Estos préstamos se usaron en muchos casos para la adquisición de viviendas mediante las hipotecas.

Además, hay que añadir que el mercado inmobiliario tras un tiempo en estado de crecimiento, terminó de despegar. Esto produjo que el precio de la vivienda en tan solo 10 años se multiplicara por 2. Esto a su vez produjo que la venta compra de viviendas se convirtiera en un negocio con grandes beneficios y de nuevo la gente se anima a la cultura del pelotazo.

Al haber tanta gente interesada en la compra-venta de viviendas, aumentaron los préstamos bancarios para la compra de estas. Esto produjo que aumentara el número de clientes de los bancos. Estos, se emocionaron al ver que les iba bien el negocio y sacaron un nuevo producto que llamaron hipotecas “subprime”. Estas consisten en dar un préstamo por encima del valor de la vivienda que se va a comprar. De este modo, si la vivienda cuesta, por ejemplo, 200.000 Euros, se le da al comprador 100.000 más para otro tipo de gastos. Este tipo de hipotecas iban dirigidas a un tipo de persona en concreto. A los llamados NINJAS. Estas personas no tenían ningún tipo de ingresos (No Ingress), tampoco tenían un trabajo (No Job) ni tampoco tenían ninguna propiedad (No Asseds). Con ello y con el resto de préstamos que hicieron los bancos, empezaron a quedarse sin dinero. Entonces se les ocurrió que podían vender estas hipotecas al extranjero y así conseguir dinero para poder seguir con las hipotecas. De este modo comienzan a vender estas hipotecas subprime al extranjero con el nombre de MBS. En el fondo estos paquetes en el que la gente invertía su dinero, eran paquetes de mierdecilla. La gente accedía a la inversión porque sonaba muy bien, ya que eran inversiones en el extranjero, y además tenían un nombre que daba sensación de importancia (MBS).


Lo que luego ocurre es que el sistema inmobiliario hace “crac”y entonces todo lo invertido en viviendas, que supuestamente en el futuro iban a costar más, se pierde. Esto afecta de especial manera a España. Digo que afecta de especial manera debido a que en nuestro país un porcentaje muy alto de los trabajos estaban relacionados con la construcción. De este modo, al caerse este sector tan importante en nuestro país, mucha gente entro a formar parte del paro. Esto produjo el aumento de gastos del estado y disminución de ingresos.

En este último párrafo he hablado de la crisis económica en España, pero me gustaría dar algún dato más.

En España sobre el año 2000, con el boom inmobiliario, se construían más de 700.000 viviendas al año, cuando la demanda natural en el mejor de los casos era de 450.000. Por tanto se construían viviendas que no iban a ser ocupadas. La gente pedía créditos hipotecarios con plazos de amortización casi ilimitados, hasta 40 años. Además, gran parte de estos créditos estaban financiados con dinero procedente del extranjero. Aumento mucho el número de empleos relacionados con la construcción en esos años debido al frenético ritmo de construcción. El paro en estos años era muy bajo. La gente se animó a comprar viviendas (no solo los españoles, si no también inmigrantes) ya que parecía un buen momento, hasta el punto de tener varias viviendas. Se seguían construyendo más viviendas a pesar de que había 3 millones de casas vacías. En 2007 estalla la crisis de las hipotecas subprime y comienzan las desconfianzas entre los bancos que dejan de prestarse dinero unos a otros. Comienza a no venderse viviendas y la demanda se paraliza. Las inmobiliarias se quedan sin entradas de dinero y se paralizan las obras. En 2007 y 2008, el mercado inmobiliario se paralizó. Sin posibilidades de vender casas terminadas (los teóricos compradores no conseguían hipotecas) ni de terminar las ya iniciadas, muchas inmobiliarias y constructoras suspendieron pagos o, en el mejor de los casos, redujeron casi a cero su actividad. Comienza a subir el paro muy rápidamente por lo que explique antes, y en apenas un año se perdieron 650.000 puestos de trabajo. El gobierno puede hacer poco. Caen los ingresos públicos, pero aumentan los gastos en paro y otros relacionados con la atención de los cada vez más indigentes. Las cuentas públicas vuelven a los números rojos tras algunos años de superávit. Y aquí estamos.